Eterno Fin de Semana…
(Feliz como una lombriz)

El Fin de semana empezó el miércoles…yendo como lata de sardina en el concurrido metro capitalino al concierto de mi banda Favorita…MEEEEEEEMPHIS, la Blusera… En el estadio Víctor Jara…supongo que a estas alturas muchos de Uds. sabrán que me la disfrute toda y me la cante toda. Sentado (no cómodamente) a la altura del escenario tenía una visión perfecta y una compañía insuperable. Coreado por todo el estadio, solo fanáticos y uno que otro newbe. Que más puedo decir, sencillamente geniales, y el gran consuelo de que tocaron exactamente lo que quería, sin pedir más, es el blues el que llevo en el alma…



Jueves…Pasando de una inocente invitación de ver películas a un carrete de proporciones insospechadas...hace rato que no amanecía pasándolo bien, integrantes pocos pero entretenidos y como siempre (como ha sido la tónica de estos últimos meses) en mi segundo hogar, Recuerdo haberme bajado una botella de ron y una conversación que se convirtió en una pelada de cables…ah! La película. Closer. Notable las actuaciones, lo que más me gusto fue el hecho de que el tiempo que pasa en la película no es el típico “lineal” que se ve en típicas películas, sino que aquí se nota que pasan años, como todos los cambios que requieren tiempo, la película deja en claro aquel paso inexorable del tiempo como medida de todo lo vivido.

Viernes... como se aprende en la vida, generalmente lo más inesperado es lo que más gratamente sorprende. Entramos al cine a las 22.30 a ver una película que ni de revisión había escuchado. Lo único que sabía que era de Escosese y que había estado nominaos para los Oscar (lo que realmente no es buen indicador), salí con una sonrisa de oreja a oreja, la película, genial en su tratamiento y en la cantidad de sangre derramada, deja sin lugar a dudas el porque del nombre. “Los Infiltrados”. (“cuando tenía tu edad nos decían que podíamos ser policías o criminales. Cuando estás frente a una pistola cargada…¿Cuál es la diferencia?) Sorprendentemente saliendo a la 1.00 de un cine central, se me planteo la opción de caminar sus cuantos kilometros… que noche más exquisita para caminar debo decirlo, siempre que se cuente con buena compañía o con música… yo contaba con las dos. (ida y vuelta, obvio)


Sábado… amanecí con la piernas molidas y con una sola en la cabeza…en la noche, fiesta Kitcsh. Es de esas ocasiones en que a uno le gustaría pasar, pero el incentivo era mayor…GERARDO en Vivo! Después de 14 años de no haber venido a Chile, estaba acá en la Blondie…de la fiesta nada que decir, dando jugo hasta morir, bailando con pulserita luminosas al son de unos cuba libre, pero definitivamente todo fue realmente surrealista cuando bailamos “atrévete a amar” (de la teleserie adrenalina) o a Luis Miguel con “te voy a olvidar” o el baile prohibido… notable..


Domingo…que puedo decir del domingo. Nada de lo que pude prever podría haber sido mejor que el domingo, seguramente todos los diarios de mi pais lo mencionaron… pero lo mejor de todo el día, es que al final, en la noche temprana, un brindis me hizo darme cuenta que en los lugares menos pensados, es cuando los mejores amigos aparecen bajo nuestras narices, y ahí estábamos, mirándonos a los ojos, con la felicidad de habernos encontrado en este rincón de mundo…

Hoy, cuando ya el día termina, tengo claro que este eterno fin de semana no me quiere dejar, de todas las cosas raras que me pasaron hoy, fue el hecho que por una fortuita conversación, pase de las letras, al carne y hueso. Y debo decir que me sentí bastante torpe al no poder escribir algo más inteligente o más coherente. Espero que se repita en algún momento, ya que después de todo, no es de esos encuentros que vivimos a cada día?